Con el propósito de brincar el muro fronterizo que divide a Sonora con el este de Arizona y vivir el sueño americano, Griselda Verdugo de 32 años, originaria de Los mochis, Sinaloa, quedó colgada boca abajo por un largo periodo de tiempo sin que nadie pudiera ayudarla, provocándole una muerte dolorosamente lenta.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés), reportó el lunes, 11 de abril a través de su página de Facebook, el hallazgo del cuerpo sin vida de Griselda colgando de un arnés entre International Road y Kings Highway, cerca de Douglas.
De acuerdo con la dependencia, la oficina del sheriff se enteró del accidente luego de que autoridades mexicanas reportaran el temible hallazgo en el muro fronterizo, por lo que desplegaron escuadrones de agentes de la patrulla fronteriza de Estados Unidos, quienes transportaron el cuerpo de Griselda a un hospital local, donde un médico dictaminó su fallecimiento.
Familiares de Griselda manifestaron a la cadena informativa Telemundo que otros migrantes intentaron bajarla del muro, pero la abandonaron al temer, se apareciera la policía migratoria:
“Lo que yo sé es que los coyotes intentaron bajarla, pero no pudieron y tuvieron que dejarla allí para que no los agarrara la migra”.
Ante esto, el sheriff Mark J. Dannels, argumentó al respecto de la muerte de Griselda:
“Este tipo de incidentes no son políticos, son realidades humanitarias en las que alguien ha perdido a un ser querido en una tragedia sin sentido.
Independientemente de las opiniones, son los hechos lo que debe dirigir nuestro progreso”.
Las dos hijas de Griselda, una de un año y otra de nueve, fueron la motivación que la llevó a intentar brindarse el muro fronterizo, para brindarles una mejor calidad de vida.
