La noche del pasado jueves, un potente sismo de magnitud 5.9 sorprendió al noroeste Irán, y saldó en 5 personas murieron y otras 120 resultaron heridas como consecuencia, esto de acuerdo con el primer balance oficial, informó la televisión estatal iraní.
El epicentro del sismo se localizó a unos 8 kilómetros de profundidad en la provincia de Azerbaiyán Oriental, en Irán de acuerdo con el centro sismológico del Instituto de Geofísica de la Universidad de Teherán.
El temblor fue seguido por al menos cinco réplicas con magnitud de entre 4.0 y 4.8 en la misma región de Irán, de acuerdo con los datos del Instituto.
La televisión estatal informó que estaban en marcha operaciones de búsqueda y rescate en 41 aldeas, aunque los daños materiales parecían concentrarse en apenas dos de ellas.
De acuerdo con testimonios reportados por la televisión local, pobladores de las regiones rurales afectadas huyeron rápidamente de sus casas. Mientras que, la agencia noticiosa Fars informó que pocas horas después del sismo muchas familias comenzaron a retornar a sus viviendas, y la situación parecía volver a la normalidad en esas zonas.
La prensa iraní no ha dado a conocer daños materiales de gravedad.
Irán está situado precisamente en la confluencia de varias placas tectónicas, siendo que dos de ellas (la Euroasiática y la Arábiga) generan una intensa actividad sísmica.
El país ha sufrido dramáticos sismos, como el ocurrido en 2003, que diezmó la antigua ciudad de Bam con un saldo de 31 mil personas muertas.
Y en 1990 un sismo de magnitud 7.4 arrasó el norte de Irán y provocó la muerte de unas 40 mil personas y dejó alrededor de 300 mil heridos y medio millón de personas sin techo.
Más recientemente, el país sufrió un violento terremoto en 2005, con saldo de unos 600 muertos, y uno más en 2012.