Cd. Victoria, Tamaulipas.- El gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal Anaya, se encuentra en una situación política y legal muy delicada, luego de que se revelara que estaría implicado en el caso del financiamiento de campañas políticas con dinero ilegal proveniente del huachicol, el robo de combustible que azota al país.
Según fuentes de la alta esfera del poder político en la capital del país, el mandatario tamaulipeco tendría una investigación documentada y bien cimentada por parte de la DEA, la agencia antidrogas de Estados Unidos, por su presunta participación en el lavado de dinero producto de la delincuencia organizada.
La relación de Villarreal Anaya con el “Rey del Huachicol” Sergio Carmona Angulo, quien fue ejecutado en una barbería en el estado de Nuevo León, sería una de las evidencias que lo vincularían con este ilícito, así como documentos bancarios, grabaciones de voz, videos y fotografías en las que aparecerían él y otros personajes que también recibieron dinero de “Los Carmona” para financiar sus campañas políticas.
Entre ellos se encontrarían Mario Delgado, dirigente nacional del partido de Reconstrucción Nacional, conocido como Morena, quien ya es señalado por las autoridades estadounidenses como parte del “Cartel de Morena”, por la influencia del crimen organizado con apoyo millonario en dólares en su partido.
También estarían involucrados Erasmo González, hoy candidato a alcalde por Ciudad Madero, Olga Sosa, candidata a senador por Tamaulipas, José Ramón Gómez Leal, candidato que va por reelección a senador junto con Olga Sosa, el alcalde de Altamira Armando Martínez Manríquez, quien pretende también buscar la reelección, y el alcalde de ciudad Victoria, Eduardo Gattás, otro repudiado por su ineficiente labor como presidente municipal de la capital de Tamaulipas.
El caso de Américo Villarreal Santiago, hijo del gobernador, es especialmente llamativo, pues después de que fuera elegido mediante tómbola para ser candidato a senador de Morena en la segunda posición, en menos de 24 horas fue relegado hasta la posición 21 y como suplente del propietario, Omar Helen García Palomar. Esta decisión habría sido motivada por la inconformidad de otros personajes de la política de Morena, como Claudia Sheinbaum, quien habría llamado la atención al líder nacional Mario Delgado.
Las ausencias y las decisiones de último momento, refuerzan la teoría de que el gobernador de Tamaulipas habría caído de la gracia de Andrés Manuel López Obrador, quien no asistió al II Informe del mandatario tamaulipeco, ni envió a ningún representante de su gabinete. Tampoco asistieron ningún titular de las 22 gubernaturas que tiene Morena, ni representantes del partido a nivel nacional, como Mario Delgado o Citlali Hernández.
Todo parece indicar que el gobernador de Tamaulipas está solo y aislado políticamente, y que pronto podría enfrentar graves consecuencias legales por sus nexos con el huachicol, un delito que el presidente López Obrador ha prometido combatir con firmeza.
Información: La Red de Altamira.
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