En el Congreso del estado, se planteó la problemática que enfrentan quienes pertenecen a grupos vulnerables de la sociedad, cuando acuden a establecimientos en donde no existen baños públicos llamados familiares, por lo que se propuso incorporar en la Ley de Salud del Estado, la obligación de los comercios con instalaciones que tengan capacidad para más de 100 personas, de contar con estas áreas.
Al presentar la acción legislativa, la Diputada Karla María Mar Loredo, destacó la necesidad de que los establecimientos de alta capacidad de aforo, cuenten con baños públicos familiares para la atención de niñas y niños menores de 10 años, personas con discapacidad y adultas mayores que para su uso se acompañen de una persona que los ayude.
Mencionó que deberán cumplir con los requerimientos arquitectónicos para facilitar el acceso, tránsito y permanencia de las personas con discapacidad, entre otros.
“Se trata de una acción legislativa noble, que además de fomentar e impulsar la atención de diversos derechos humanos en favor de los segmentos sociales descritos, contribuye a facilitar la vida de las familias tamaulipecas e incentivar una mejor convivencia en establecimientos públicos”, precisó
La Presidenta de la Comisión de la Familia, señaló que se pretende impulsar la atención a esta situación que enfrentan los grupos vulnerables, en establecimientos con una capacidad abundante de personas, pues hoy en día no es suficiente que en los baños públicos se ponga un lugar en donde cambiar a los bebés o un sanitario especial para las personas con discapacidad.
“Es preciso fomentar la construcción de baños familiares, los cuales satisfagan plenamente y de manera funcional las necesidades de desarrollo e inclusión de las personas que requieren de nuestro apoyo”, enfatizó.
La propuesta de las Diputadas y Diputados de Acción Nacional en el Poder Legislativo, fue turnada para su estudio y dictamen a la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables.
