Con rehabilitación y equipamiento se garantizará abasto a la ciudad en caso de contingencia en Acueducto Anzaldúas
En caso de contingencia en el Acueducto Anzaldúas, Reynosa tendrá garantizado el abasto de agua potable con las obras de rehabilitación y equipamiento de la potabilizadora Pastor Lozano, donde se invierten más de 37 millones de pesos.
El abastecimiento de agua cruda es del río Bravo a través del acueducto, el cual también se encuentra en proceso de equipamiento total, pero si llegara a surgir alguna eventualidad, estaremos preparados para extraer agua del canal Rodhe para su potabilización y distribución a la población, informó el gerente general de la COMAPA Reynosa, Jesús Ma. Moreno Ibarra.
“Como parte del Programa 2020, donde el Estado y Municipio desarrollan obras para mejorar el servicio de agua potable, estos trabajos garantizarán el abasto a la población por los próximos 20 años”, explicó.
La obra contempla la instalación de 3 equipos con capacidad de bombear 600 litros por segundo, con lo que se duplicará la capacidad de potabilización de agua cruda que se obtenga del canal, precisó.
Moreno Ibarra destacó que se automatizarán las instalaciones, para hacer más eficiente la operación con equipo eléctrico y modernizado.
“Es una obra importante para poder reaccionar en caso de contingencia en el acueducto, pero de requerirse su operación nos permitirá garantizar el abasto de agua potable a toda la ciudad”, añadió.
Recordó que de la planta Pastor Lozano se distribuye agua a todas las estaciones de rebombeo para cubrir la demanda del servicio.
“Los proyectos que se encuentran en proceso de obra fueron diseñados mediante estudio previo en el cual se definieron las principales necesidades para dar respuesta y mejorar los servicios del organismo”, finalizó Moreno Ibarra.