En Tijuana un niño de 1 año y medio de edad que se encontraba en el patio de su vivienda fue atacado en el cuello por un perro. Debido a la gravedad de las heridas, el menor falleció y sus padres decidieron sacrificar al animal.
Según los testimonios y la versión de las autoridades, el menor se encontraba jugando en su hogar cuando el perro comenzó a morderlo y se rehusó a soltarlo.
El personal del Departamento de Control Animal decidió llevarse al perro y sacrificarlo. Este canino es una cruza de varias razas y de talla mediana.